El trigo es uno de los cultivos más extendidos en la península y en el mundo. Para gestionarlo bien y sacar un buen rendimiento es importante conocer las principales enfermedades del trigo.
Enfermedades del trigo
Roya (Puccinia graminis)
La roya es una enfermedad producida por un hongo que puede aparecer en cualquier momento del cultivo de trigo. Se desarrolla en épocas o zonas de humedad alta y temperaturas suaves (15-25 ºC) Durante el invierno reside en el cultivo y cuando las condiciones ambientales son favorables desarrolla las esporas.
¿Cómo identificarla? Se manifiesta con unas manchas amarillo-anaranjadas en el anverso de las hojas del trigo y en espigas.
Septoriosis (Septoria tritici)
La Septoriosis puede llegar a suponer pérdidas de más del 50% del cultivo. El hongo que la produce se adapta muy bien a las temperaturas suaves y frías para reproducirse (5-20 ºC)
Cuando el cultivo se ve afectado se pueden ver pequeñas manchas circulares en las hojas de un color marronoso y unos pequeños puntos negros en el interior de las manchas. Esa enfermedad del trigo se dispersa mediante el viento y las gotas de lluvia o del rocío.
Oídio del trigo (Blumeria graminis)
Esta enfermedad la produce un hongo de color blanco-gris que se parece a la ceniza. Sus esporas se instalan en las hojas del cultivo y disminuyen toda la parte funcional aérea de la planta: fotosíntesis, llenado del grano, peso específico…
Mancha amarilla del trigo (Pyrenophora tritici–repentis)
Este hongo provoca una mancha circular de color marrón con un halo característico amarillento que envuelve el perímetro de la planta.
Afecta al peso del grano y su calidad.
Rincosporiosis (Rhynchosporium secalis)
La rincosporiosis se detecta por la aparición de manchas grandes y alargadas de color marrón y una línea negra en todo el borde de la mancha. Afecta a las hojas y rallo, disminuyendo el rendimiento, el ahijado y las espigas.
Este hongo se dispersa principalmente por las gotas de agua, por lo que no se desplaza mucho por el cultivo.